Embolización de Miomas Uterinos |
En los últimos años la radiología intervencionista ha aportado grandes avances en la terapia de mínima invasión, ofreciendo a los(as) pacientes nuevas alternativas para el tratamiento de algunos padecimientos, uno de estos es la miomatosis uterina, a través de la embolización de miomas uterinos, que consiste inicialmente en cateterizar selectivamente la arteria nutricia para su posterior oclusión. Hoy en día la embolización de miomas uterinos es un procedimiento que ofrece grandes ventajas como son la disminución de la sintomatología (hiperpolimenorrea, dolor, sensación de masa pélvica), disminución de la morbilidad y se le brinda a la paciente la oportunidad de mantener el útero, ya que se ha demostrado que la función de este no es exclusiva de fertilidad. Los criterios de inclusión consisten principalmente en pacientes con miomatosis múltiple, de localización submucosa, intramural y subserosa cuando no están pediculados, pacientes sintomáticas y mujeres en etapa reproductiva o en climaterio. El protocolo de estudio se hace en base al diagnostico clínico y con imágenes de Resonancia Magnética y/o Ultrasonido, se solicitan tiempos de coagulación y las pacientes son sometidas a una valoración preoperatoria. Existen grandes series publicadas en Estados Unidos, Canadá, Europa y Asia, en donde reportan el éxito de este procedimiento, con una disminución significativa de las complicaciones y resultados favorables a corto plazo, con una disminución importante del tamaño de los tumores que es directamente proporcional a la disminución de la sintomatología. Actualmente se encuentra en la literatura, dos estudios europeos realizados en Holanda y en Escocia, con más de 150 pacientes embolizadas en 5 años, comparadas con un número similar de mujeres miomectomizadas e histerectomizadas. Estos estudios son el EMMY (Embolisation vs. Myomectomy) y el REST ( Randomised study of embolisation and surgical treatment for uterine fibroids). En conclusión la embolización de arterias uterinas ha demostrado su utilidad en mujeres con miomatosis uterina de medianos a grandes elementos, y es una alternativa no quirúrgica para el control de la sintomatología condicionada por estos tumores. En 1993 el médico francés Jacques Ravina y su grupo comenzaron a efectuar la embolización bilateral de las arterias uterinas en pacientes que debían ser sometidas a cirugía por fibromas uterinos con el objeto de disminuir el sangrado intra y post operatorio; los resultados obtenidos con este método superaron esta expectativa, publicando en 1994 los primeros y favorables resultados obtenidos. A partir de esto numerosos trabajos científicos mostraron la eficacia, seguridad y durabilidad del tratamiento de los miomas uterinos mediante la oclusión de las arterias uterinas. Este procedimiento esta aprobado por la FDA. |